Red Bull tiene problemas con su motor dañado en Silverstone
Max Verstappen y el equipo Red Bull-Honda podrían complicarse y mucho después del accidente del holandés en la primera vuelta del Gran Premio de Gran Bretaña, cuando su coche chocó con violencia contra las barreras protectoras en Copse. El toque de Lewis Hamilton no solo ha provocado un gran debate sobre los duelos en la pista sino que creó un verdadero bombazo baja la línea de flotación de Red Bull, un daño técnico mayor al equipo de Milton Keynes, ahora obligado a analizar a fondo cómo afrontar las próximas carreras .
Si la unidad de Silverstone ya no se puede utilizar, Verstappen tendría que afrontar las próximas 13 carreras con un solo motor nuevo disponible, la unidad número 3, alternándola con la número 1 (a partir de Hungría). En Japón intentamos salvar todos los componentes del motor gravemente dañados por el accidente, de lo contrario , la única alternativa sería utilizar una unidad de potencia adicional . Una eventualidad que costaría perder puestos en la grilla debido a la normativa actual, que impone sanciones.
Todavía no hay grandes noticias sobre la unidad de potencia según Helmut Marko, mientras que Masahi Yamamoto admitió estar «preocupado» y fue consultado también por el dinero que deberá invertir Red Bull como consecuencia del choque, y estimó que se acerca al millón de euros, mientras se aguarda por saber qué pasará con la unidad de potencia Honda, que fue enviada a Japón para su análisis.
«Tal y como están las cosas, son unos tres cuartos de millón de euros. Todavía no se ha aclarado del todo la situación del motor, si está bien o no. Así que, sobre todo en tiempos de tope de gastos, eso ya es una cantidad significativa, que por supuesto también nos perjudica», dijo Marko.
Pero pese a las palabras iniciales de Marko, este viernes Christian Horner, dijo que la cifra es mucho mayor.
«Hay que reconocer el mérito de los estándares de seguridad de estos coches, del Halo y de los sistemas de defensas, porque el impacto fue tal que realmente rompió el asiento de Max», dijo Horner. «El coche podría haber volcado con bastante facilidad, lo que fue una preocupación inicial expresada por el equipo médico que acudió en primer lugar, pero afortunadamente no lo hizo».
«El otro factor importante es el costo del accidente. Este accidente nos ha costado aproximadamente 1,8 millones de dólares y un accidente así tiene enormes ramificaciones en una época de límites presupuestarios».
Otro detalle importante respecto a la lucha mundial es el de la salud del otro motor del Red Bull número 33, el ‘cerebro’ de Max Verstappen . Aunque el piloto holandés haya vuelto a casa, volviendo al simulador para acostumbrarse a conducir de nuevo, no debe subestimar el esfuerzo de una carrera de Fórmula 1 a su regreso . Será fundamental para Red Bull controlar la condición física de su mejor piloto. En 2020 el piloto Oliver Askew, protagonista de un contundente golpe en las 500 Millas de Indianápolis, corrió luego varias carreras con mucha dificultad física por una conmoción cerebral que se había subestimado. Pero es solo uno de los muchos casos de conductores «aturdidos» mucho después de un accidente.