Hoy, nos damos una vuelta por el Autodromo Nazionale Enzo e Dino Ferrari, Imola.
El Autodromo Nazionale Enzo e Dino Ferrari, con una longitud de pista de 4.909 metros, situado en Imola, una ciudad de alrededor de 70.000 habitantes en la región de Emilia-Romaña, es uno de los principales de Italia, habiendo albergado carreras de numerosos campeonatos mundiales y europeos de automovilismo y motociclismo, además de italianos.
El proyecto para la construcción de un circuito se remonta a 1946, con algunos promotores, entre ellos Checco Costa, presidente del Moto Club de Imola.En abril de 1953, se disputaron las primeras carreras de motociclismo y en junio de 1954 la primera carrera de automovilismo.
En abril de 1963 se corrió por primera vez F1 en Imola como fecha no puntuable para el campeonato, con el triunfo de Jim Clark con Lotus. Una segunda carrera tampoco válida para el Mundial se corrió en 1979 y fue ganada por Niki Lauda con Brabham-Alfa Romeo.El GP de Italia de 1980 tuvo lugar en Imola y fue ganado por Nelson Piquet con Brabham-Ford. Para que ese país pudiera ser anfitrión de dos Grandes Premios de F1, a partir de 1981 la carrera de Imola se denominó GP de San Marino.
La última edición había sido en 2006, con triunfo de Michael Schumacher con Ferrari, pero en la temporada 2020 debido a las circunstancias se realizó en Imola el GP de Emilia Romagna ganado por Lewis Hamilton con Mercedes.El circuito original sufrió una importante reforma en 1973, cuando se le agregaron las chicanas Acqua Minerale, Variante Alta, Variante Bassa y Traguardo para mejorar la seguridad. Otra mejora importante fue en 1994, cuando tras un fin de semana trágico, Tamburello y Villeneuve pasaron de ser curvas rápidas a chicanas, se recortaron las rectas contiguas a las curvas de Rivazza y, como contrapartida, se eliminaron la antigua Variante Bassa y la chicane Acqua Minerale. La chicana Traguardo pasó a llamarse nueva variante Bassa.
En el 2007 el circuito se sometió a una series de cambios eliminando la nueva Variante Bassa, reemplazándola por una recta, además se construyeron nuevos boxes y se amplió el paddock. En 2008 se hizo una chicane contigua a la recta de meta que es usada solo por las competiciones de motociclismo.En el año 1994 dos pilotos perdieron la vida en sendos accidentes en el GP de San Marino, Roland Ratzenberger en los entrenamientos del sábado (en la curva Gilles Villeneuve) y Ayrton Senna (en Tamburello) el domingo en la carrera. Ese mismo fin de semana, el viernes, Rubens Barrichello tuvo un fuerte accidente que lo mantuvo alejado de las pistas por semanas, el domingo en la largada el Benetton del finlandés Jirki Jarvi Letho se quedó parado y el portugués Pedro Lamy con Lotus no pudo esquivarlo, provocando un accidente en el cual volaron hacia la tribuna ruedas y pedazos de los autos, hiriendo a 9 espectadores; por si faltaba algo más, se produjo la última locura del nefasto fin de semana: tras su parada en boxes el Minardi del italiano Michele Alboreto perdió la rueda trasera derecha la que rodó por los boxes hiriendo a 2 mecánicos de Ferrari y 2 mecánicos de Lotus.
El circuito rodea completamente el Parco delle Acque Minerali, histórico pulmón verde de Imola desde 1830, un maravilloso parque donde puedes perderte entre amplios caminos y prados arbolados.Cerca de una de las cuatro entradas al parque, encontramos el Memorial dedicado a Gilles Villeneuve, inaugurado en 1983, el monumento está posicionado en la curva que lo vio protagonista de un espectacular accidente y que lleva su nombre, aunque ahora es una variante. El canadiense corrió su última carrera en Imola el 25 de abril de 1982, antes del fatal accidente en Zolder, Bélgica.
En las proximidades de la curva de Tamburello, en 1997, se inauguró un monumento a Ayrton Senna, sitio que se convirtió en lugar de peregrinación para los fanáticos de la F1. Es una estatua de bronce de 2 metros de altura, junto a ella podemos ver banderas y recordatorios de todo tipo, también al otro lado del circuito, en el punto exacto de la colisión contra el muro se le rinde homenaje.También, por parte de los aficionados, aunque en menor medida, se recuerda a Roland Ratzenberger en el lugar del accidente con fotos, banderas y carteles. En la curva Tosa una tribuna lleva su nombre.Además podemos hacer una visita al Museo que lleva el nombre de Checco Costa, director deportivo italiano, uno de los promotores de carreras en Imola desde 1946.
La exposición cuenta los orígenes del circuito a través de los autos y motos de carrera.En las distintas exposiciones, que van cambiando periódicamente, se pueden observar los más variados modelos de coches y motos desde los años 50 hasta la actualidad, Ferrari y Maserati, el Lotus de Colin Chapman, el Porsche 500 RS, algunos autos con los que corrió Ayrton Senna y muchos más recuerdos del piloto fallecido en ésta pista.Tan sólo el río Santerno separa (o une) la ciudad de la entrada principal del circuito, o mejor dicho, de la Piazzale Ayrton Senna Da Silva (inaugurada en 2014 para recordar el 20 aniversario de la muerte del piloto brasileño) que es el lugar donde desemboca el puente que llegando desde la ciudad cruza en curso fluvial hasta las instalaciones del trazado.Por la entrada principal se accede a las instalaciones del circuito: la sala de prensa, el Museo Checco Costa, los boxes, el paddock y lo que más destaca, la Torre dell’Autodromo, símbolo histórico del trazado. Al otro lado de la pista está la tribuna de recta.El circuito se puede bordear totalmente, está perfectamente señalizado, se indica cómo llegar a la curva Tamburello, al Parco delle Acque Minerali, a la estatua en honor de Ayrton Senna, a la antigua curva Villeneuve y a las demás zonas. Un recorrido que te llevará un par de horas y que te transportará a una parte de la historia del automovilismo en general y del circuito en particular.