Temporada 2023

Editorial: Ferrari en crisis ¿Quien es el responsable?

Editorial: Ferrari en crisis ¿Quien es el responsable?

Desde que recuerdo, soy ‘Barra Brava’ de Ferrari, no me acomoda la definición ‘Simpatizante’ ‘Fanático’ ‘Tifosi’ etc.…, obviamente, me gusta el automovilismo y la F1… pero Ferrari ocupa el 95% de mi cerebro…

Me encantaría mostrarles cómo es que vivo una carrera, es enfermamente gracioso, preocupante, digno de análisis por parte de decenas de profesionales, rara vez me siento, camino varios Km desde el sillón hasta la tele, grito, pateo, insulto mucho (capítulo aparte), babeo, hablo solo y ni hablar de este último tiempo con mi escudería.

Dejo en claro quién soy y desde dónde escribo, ya que voy a hacer el esfuerzo de apartarme de todo eso y golpear las teclas desde un lugar neutral, lo más profesional posible, consultando y confirmando con tres fuentes para no ser utilizado cómo medio de operaciones de gente que siempre está tirando rumores para instalar situaciones que favorezcan a algunos y perjudiquen a otros… La llamada Silly Season.

Como explicar la debacle de Ferrari en dos líneas… no poseo ese poder de síntesis, el problema no viene desde ahora, esto empieza desde que nació Enzo, Ferrari es así y no hay que andar intelectualizando la dinámica de Maranello.

Bien, pero por algún lado hay que empezar…

El año pasado debuta el nuevo reglamento, ese que iba a comerse a los chicos crudos, la gran innovación de los últimos 5000 años etc. etc.

Pero resulta que ese debut no fue tan sorpresivo ya que fue postergado por la pandemia y más allá de todos los inconvenientes que causó ese maldito bicho… a la F1 le dio un año más para trabajar, diseñar, encontrar zonas grises en ese reglamento inexpugnable que habían delineado un grupo de ‘Iluminatis’ y que ni bien los autos tocaron la pista, en vez de lagunas, los ingenieros habían encontrado océanos para torcer la letra escrita y sacarle más rendimiento a sus creaciones.

En definitiva, la FIA puso el requerimiento de construir plataformas totalmente nuevas, empujando a la categoría a entrar en una pseudo Monomarca, haciendo gastar millonadas (literal) a los equipos para equiparar a los más poderosos con los más débiles, pero el ADN de la F1 es otro muy distinto a lo que imaginan los  nuevos dueños de la categoría, acostumbrados a ver 30 autos idénticos, repartidos en 1 chasista y dos motoristas, monoplazas sólo distinguibles por sus colores, que corren 17 carreras básicamente girando a la izquierda a 400 km/h en óvalos gigantes o no tan gigantes, que se alternan con algunos circuitos y callejeros…

FERRARI SF-23 CARLOS SAINZ – FRED VASSEUR – CHARLES LECLERC

En cambio, la F1, ya sumida en la imposición de los popes a seguir en el camino ‘todos iguales’ empieza a buscar senderos dentro de esos mares grises y sutilmente los autos se empiezan a diferenciar, van tomando rumbos diferentes dentro de esas caprichosas reglas ‘rigurosamente mal redactadas’.

Inmediatamente el trío que viene cortado en la cima hace años, cambia el norte y de la insoportable supremacía que había ostentado Mercedes desde el año 2014, el dominio pasa a manos de Ferrari y Red Bull…
Ambos con filosofías muy diferentes ‘hablando de diseño’, destacaron del resto siendo un poco superior Ferrari, ayudado por las varias roturas de la PU del Red Bull. Mercedes en su propio camino intentando con una solución ‘Zeropods o sea, ‘Auto sin Pontones’ que fue poco menos que inmanejable para el dúo de pilotos británicos a cargo de gestionarlo.

Ese destaque de Ferrari duró poco, ya que, a medida que Red Bull solucionaba sus problemas, Ferrari se empeñaba en auto boicotearse regalando puntos y victorias gracias a errores propios, así que, Red Bull empieza a enderezar un mal comienzo gracias a sus propios ingenieros y a toda la Scudería Ferrari encaprichada en regalar terreno a su rival directo.

Entonces… la rajadura (que siempre estuvo en Ferrari) empieza a agrandarse y una de las primeras figuras que se asoman de ella, es la de Binotto.

Quien es Mattia Binotto

ANDREA STELLA – CHRIS DYER – MATTIA BINOTTO – MICHAEL SCHUMACHER

Mattia, graduado en Ingeniería Mecánica en el Politécnico Federal de Lausana (ciudad donde nació) en 1994, obtuvo una maestría en Ingeniería Automotriz en el Departamento de Ingeniería «Enzo Ferrari» de Módena.

En 1995 se unió al equipo de pruebas de la Scuderia Ferrari como ingeniero de motores, pero no sin dificultades. En Maranello había un bloque de reclutamiento en los departamentos técnicos, por lo que Binotto se unió oficialmente a Ferrari con un rol en la oficina de personal, aunque su verdadera tarea era, obviamente, la de un ingeniero de motores, un papel que desempeñó en el equipo de carreras desde 1997 hasta 2003. Luego siguió tres años como ingeniero de motores de «carrera», mientras que en 2007 fue nombrado jefe de ingenieros de carreras y de ensamble. En 2009 ocupó el cargo de jefe de operaciones de motores y Kers. En 2013 fue nombrado subdirector de motor y electrónica bajo la dirección de Luca Marmorini, y doce meses después, Sergio Marchionne le encomendó la gestión del departamento de motores. La escalada continuó a un ritmo acelerado: a Binotto se le asignó la gestión técnica de la Scudería el 27 de julio de 2016, en reemplazo de James Allison, y su último escalón fue el ser nombrado director de la Escudería tras la salida forzada de Maurizio Arrivabene.

ALONSO RAIKKONEN VETTEL

Empieza una nueva era, algo que los tifosi esperaron durante años, los mismos que vieron tropezar a enormes figurones como Kimi, Alonso o Vettel que fueron sacrificados a padecer un entorno de trabajo insalubre ya que quienes estaban a cargo de hacerlo, no era gente idónea para los cargos que ostentaban… personas que provenían del entorno Ferrari, que eran buena gente, que hacía 20 años que estaban en Maranello, pero nadie con respaldo real o espalda para su puesto.

De tanto en tanto, se intentó traer gente foránea, pero todos rechazaron o dejaron su cargo por la testaruda idea de Ferrari de mantener su entorno de trabajo en Maranello.
Todo el mundo F1 está separado por apenas unos Km en Inglaterra… así es que Newey rechaza la oferta de Ferrari quien le ofrece el cargo de diseñador (algo que a Adrián le interesaba y mucho) por la imposición de tener que trabajar en la Fábrica y no remotamente con viajes regulares a Maranello.
O el caso de James Allison quien había logrado encaminar el rumbo de la Scudería pero debido a una desgracia familiar (la muerte de su esposa) se ve obligado a estar en Inglaterra con sus dos pequeños hijos, pedido mediante a Ferrari para permanecer más tiempo en Gran Bretaña, la negativa de Ferrari obliga a la renuncia de Allison y el inmediato pase a Mercedes siendo todavía hoy, una de las figuras claves en el éxito de la casa Anglo-Germana.

JAMES ALLISON – SEBASTIAN VETTEL

Christian Horner casi deja Red Bull en 2022 por Ferrari «Me tomó toda una noche convencer a Christian Horner de que se quedara en Red Bull y no se fuera a Ferrari. ¡Y nos costó unos cuantos millones!». Decía Marko

Todo esto lo lleva a Binotto a la dirección de la escuadra… un tipo capacitado, del riñón de la casa de Maranello, querido y respetado, pero… sin poder de fuego.

SIN PODER DE FUEGO

O sea… Mattia, un excelente técnico, respetado por sus pares, pero totalmente inútil ante cada situación resolutiva que se presentaba en los escritorios de la FIA…

Dentro del equipo, más o menos lo mismo, poco resolutivo, los departamentos no conectaban, así que Binotto, corría de oficina en oficina, de cabeza metido en el diseño, metido en los motores, de cabeza metido en el chasis, de cabeza…. Toto Wolff le dijo alguna vez a Binotto que delegara tareas ya que a ese ritmo iba durar lo que dura una vela en medio de una tormenta.

MATTIA BINOTTO

A todo esto, hay que sumar los horrores estratégicos de un tal Iñaki Rueda, regalando victorias y puntos a granel durante años, Mattia, se deshace de un tal Vettel de una forma que enojó a propios y ajenos, a nadie le gustó la forma que Seb salió por la puerta trasera de la Scudería, la contratación de Sainz o que nunca definió el orden jerárquico entre los pilotos, habiendo claramente un Nº1 y un Nº2.

Pasa el tiempo, se suceden los horrores, el que conoce un poco de F1 sabe que Ferrari es una Rara Avis dentro del Paddock, si para el resto de los equipos algo es color ‘Blanco’, para Ferrari es color ‘Lapislázuli’.

Todo se amplifica, se distorsiona, se complica, la prensa italiana lo toma como tema nacional, los tifosi reniegan hasta el hartazgo sobre la actualidad de su amada escudería.

MATTIA BINOTTO – JOHN ELKANN

La salida de Montezemolo no fue para nada clara, la toma del poder de Sergio Marchionne en representación de los Agnelli menos, encima Sergio se muere en medio de su gestión, lo reemplaza un tal Camilleri que tenía tanta F1 encima como yo porte y presencia para desfilar un vestido de alta costura.

Al salvataje entran Benedetto Vigna y John Elkann (Batman y Robin), Vigna, director ejecutivo de Ferrari, cuyo pasado está en el mundo de los microchips, vinculado a la videoconsola Nintendo entre otros ¿¿¿¿??? Y Elkann siempre más preocupado viendo cómo cotiza Ferrari en la bolsa de USA que en su desempeño en pista. Más el condimento especial… Lapo Elkann, una especie de Ricardo Fort pero versión ‘Agnelli’ (¿La Batichica?)

La debacle de Ferrari deportivamente se va acentuando cada día un poco más, Binotto que oficialmente no era director técnico, pero que desempeñaba las funciones de director técnico y team principal, tuvo que admitir, (tal cómo le aconsejaba Toto Wolff) las responsabilidades eran excesivas. Pero al aflojar la cuerda, no nombró a otro director técnico, sino que lo sustituyó por una dirección colegiada en la que en cierto modo Binotto era el árbitro/coordinador y tenía la última palabra. Iba a fondo contra el Iceberg…

DESATINADO MOMENDO DÓNDE BINOTTO REPRENDE A LECLERC EN PÚBLICO

No contento con esto, se encarnizó con Charles Leclerc quien ante un reclamo después de que un error estratégico que le costó al monegasco una posible victoria en Silverstone, Binotto lo apunta con el dedo índice y lo reprende públicamente.

Binotto y Ferrari estaban ya al borde del precipicio y deciden dar un paso al frente… aproximadamente en junio de 2022, Binotto discute con la directiva de Ferrari, se olvida de todo lo referente a la Gestione Sportiva, se frena el desarrollo del auto 2022 y el diseño de la SF-23.
Binotto tenía decidido irse, Elkann y Vigna le decían que no podía hacerlo hasta finalizar su contrato porque el resultado de esa acción iba a ser catastrófico. (Videntes)

A todo esto, Ferrari seguía siendo el motivo de burla de todo el mundo de la F1, horrores estratégicos, roturas insólitas, choques en boxes, pero no de autos, más bien de gente que corría como gallinas sin cabeza sin saber que hacer. Binotto falta a varias carreras, el rol lo llevaba a cabo su alfil Laurent Mekies.
Se empieza a buscar un reemplazante, suena el nombre de Fred Vasseur… El rumor, con el tiempo se confirma y el paso de mando fue normal, cordial pero el problema estaba en la cocina….

Otro comienzo, otra nueva era, otra esperanza…

FRED VASSEUR – MATTIA BINOTTO

Binotto se va, pero también empieza el éxodo de figuras clave para el desarrollo del nuevo auto, como el caso de David Sanchez ingeniero jefe en lo relacionado con el desarrollo aerodinámico del monoplaza, “Es inevitable. Hay gente que estuvo muy cerca de Binotto y que prefiere irse. No estoy preocupado. Me imagino que había otros que también temían por su futuro», comentó Vasseur…

DAVID SANCHEZ


Mekies está y no está, retenido en su puesto gracias a una negociación con Red Bull que lo quiere para reemplazar a Franz Tost en AlphaTauri que se va a fin de año, pero Ferrari no lo quiere largar si antes no le sueltan a dos aerodinamistas importantes discípulos de Newey quienes ya tienen todo arreglado para ir a Maranello pero que todavía hoy están en un limbo.

O sea… se fue Binotto, pero quedó toda su gente, dividida entre los que quieren irse y los que andan con la careta de mi tía Luisa para pasar desapercibidos y conservar su puesto, párrafo aparte, Iñaki Rueda seguía agarrado a su puesto como mugre de talón y tienen que sacarlo tirándole baldazos de agua fría…  
El auto que había debutado victorioso y había ilusionado a los tifosi, quedó sin desarrollar, ya que el trabajo en el, fue detenido en Junio 2022 cuando empezó la guerra entre Binotto, Elkann y Vigna.
Se conviene que la solución más rápida para 2023 es barrer la mugre debajo de la alfombra, o sea, usar la SF-75 cómo base, montar el motor fortalecido de sus fallas, algo de maquillaje y a la pista como la SF-23.

FRED VASSEUR Y EQUIPO

Vasseur hoy está al frente de un plan a largo plazo, todavía con las manos atadas tratando de campear el temporal, sacando agua del Titanic con un trapo tipo ballerina, pero gastado, con un auto medio Frankenstein, con un equipo de gente que él no eligió, con un piloto con ADN de campeón pero absolutamente frustrado viendo cómo pasan sus mejores años y el pescado sigue sin vender, con la prensa italiana tirándole con todo lo que tienen a mano, tal cual hicieron con Todt en su momento cuando agarra el fierro caliente en el ’94.

Los ‘deslices’ en los equipos de F1 son medidos con cierta holgura por parte de la FIA (caso Red Bull y Mercedes que se pasaron tres pueblos con el presupuesto 2022), pero como explicaba por allá arriba, la falta de poder de fuego de Binotto frente a los escritorios del órgano rector, debilitó y mucho a la Scudería… así que cualquier desliz (en este caso, económico) puede ser castigado severamente.
Por eso, Vasseur decide gastar en el auto 2024 y no mejorar este… va tirando piezas en la SF-23 que servirán para armar a la nueva criatura pero que no cuentan como presupuesto 2023.

Si lo dejan trabajar, armar su propio esquema de trabajo, quedarse con lo que sirve y prescindir de lo que lo estorba, que Ferrari se arregle con Horner, le libere a Mekies y de esa forma se saca un ancla de al lado, consigue los dos buenos activos de Red Bull para concentrarse en el auto 2024, la cosa va a marchar a buen puerto… no este año ni siquiera el año que viene…. Pilotos tiene, presupuesto le sobra, sólo hay que dejarlo trabajar y sobre todo, que no le pongan palos en la rueda y que lo dejen en paz .
Habrá que tener paciencia.

Por Gustavo M. Antonio para La MáximaF1

error: CONTENIDO PROTEGIDO