El truco de bajar la cola del auto… ‘La solución milagrosa de Ferrari’
Red Bull inventó el sistema, otros ahora lo han perfeccionado. Una vez que se alcanza una cierta presión de contacto, la cola desciende hasta que el flujo se detiene. Te explicamos cómo funciona el truco y qué aporta.
Ferrari es capaz de bajar la parte trasera de la SF-24 en recta gracias a las suspensiones. Red Bull inventó el sistema pero lo de Ferrari es aún mejor porque nadie absorbe tan bien los bordillos y los baches sin dejar de ser competitivo en las curvas rápidas.
Se denomina «suspensión interconectada delantera y trasera». Los elementos de amortiguación individuales estaban conectados mediante tuberías hidráulicas. La compensación entre ellos tenía como objetivo minimizar los movimientos de cabeceo del vehículo durante los cambios de carga.
Con la introducción de los coches de efecto suelo, la FIA ha puesto freno a esta práctica. Desde 2022 sólo se autorizan suspensiones convencionales. Es decir, resortes de disco, resortes helicoidales o barras de torsión.
Sin embargo, en el primer año de la nueva generación, Red Bull consiguió bajar la parte trasera de forma selectiva en las rectas. Esto resultó en una ventaja a veces espectacular en términos de velocidad máxima. El efecto DRS fue diseñado para este propósito.
Fue sólo en el tercer año que la competencia reaccionó. Ferrari, Mercedes, Haas y Racing Bulls cuentan hoy con sistemas similares. Incluso se supone que el desarrolló Ferrari es mejor que el de Red Bull. Haas utiliza la tecnología Ferrari desde el GP de Miami.
Mientras tanto, ya no se trata sólo de conseguir un poco más de velocidad máxima. Los sistemas son cada vez más sofisticados y permiten optimizar la distancia al suelo trasera en determinados rangos de velocidad. La ganancia de velocidad máxima no es la única ventaja.
Si la técnica funciona bien, se puede ajustar el chasis para que la parte trasera quede relativamente alta en curvas lentas y media-rápidas, lo que deja margen para amortiguar pianos e irregularidades con cierta suavidad.
A medida que aumentan la velocidad y la carga aerodinámica, la distancia al suelo permanece en un mínimo predefinido y así lograr una distancia óptima para tomar curvas rápidas. Sólo cuando la carga es máxima en línea recta se bloquea la suspensión y se produce la pérdida.
La técnica necesaria para que funcione no es gratuita y hace que el diseño tenga que incorporar unos cuantos kilos, pero da sus frutos. Ferrari ha perfeccionado su chasis, ningún otro auto absorbe los baches y pianos tan bien como la SF-24, sin dejar de ser competitivo en curvas rápidas.